Noticias

Deportes La Copa de la felicidad

12-05-2024

La Copa de la felicidad

Entre 15 y 20 mil personas pasaron ayer por el Centro Cultural San José para fotografiarse con la Copa del Mundo de la FIFA que levantó Leo Messi con la selección argentina en Qatar.

 

Miles de olavarrienses pasaron a lo largo de toda la jornada sabatina por el Centro Cultural San José para contemplar, mimar, venerar, sacarse una fotografía y agradecer a esa mágica figura dorada que por tres veces se dejó abrazar por otros tantos capitanes de las selecciones argentinas.


Nada, ni nadie fue capaz de provocar en la historia de este país fenómenos de felicidad colectiva tan inmensos como los provocados por la Copa Mundial de la FIFA, lo cual quedó demostrado en el incesante desfile de todas las edades desde que se abrieron las puertas del viejo edificio frente al arroyo Tapalqué a primeras horas de la mañana hasta que se cerraron cuando ya habían pasado muchos minutos desde la caída de sol.


Cerca de las 16 la cola de tres o cuatro personas comenzaba en las puertas de la sala donde se exhibieron los tres trofeos (empequeñecidos quedaron la Copa América y la Finalissima flanqueando a la Copa del Mundo) y luego de recorrer el sendero en un ángulo de 90º seguía uno 400 metros en la vereda del Centro Cultural.

 


Una vez atravesada la puerta de la sala donde se exhibían los tres trofeos ganados por la “Scaloneta” los más chicos interpretaban ver la base de malaquita y oro las huellas digitales del capitán Leo Messi; los de mediana edad recordaban también cuando a unas de sus hermanas Diego Maradona la sacudió sobre su cabeza en el Estadio Azteca de México y los que ya peinan canas la tarde de invierno que Daniel Passarella ofrendó a la mayor de las tres al cielo del “Monumental” de Núñez.


Mario Echeverría, secretario de coordinación del Consejo Federal, fue el encargado de traer los tres trofeos desde el predio “Leo Messi” que la AFA tiene a la vera de la autopista Ricchieri, en Ezeiza, hasta el Centro Cultural San José.


Una vez adentro, sobre todo la Copa del Mundo despertó las más variadas sensaciones y emociones. Sergio, de 45 años, recordaba algunas imágenes distorsionadas del Mundial ganado por la Argentina en México ’86 y en Qatar se dio el gusto de confirmar todo lo que le parecía haber sentido 36 años antes.

 


“Nada que ver una cosa con la otra. En aquel entonces era muy chico. Ahora entrar y ver la Copa fue muy emocionante porque me ayudó a revivir aquel momento” reveló.


Médico de profesión, la final lo sorprendió en Laprida y fue lo primero que recordó apenas atravesó la puerta de la amplia sala: “Estaba haciendo guardia, comiendo y cuando arrancó la definición empezamos a gritar todos. Por ahí escuchamos al cocinero que gritaba de emoción. Verla ahora en Olavarría me hizo acordar de ese chico que no conocíamos y terminamos todos abrazados en la plaza”.


Alma tiene 9 años y no dudó en decir que lo primero que sintió al pararse detrás de la Copa Mundial de la FIFA fue “locura” y añadió que “verla fue increíble. Enseguida me acordé de todo lo que sentimos en casa el día que la ganaron”.

 


Ian tiene dos años más que Alma y su primera sensación fue de nervios. “Era un sueño conocerla y cuando la tuve al lado no lo podía creer. Me acordé de cuando Montiel metió el penal. Nunca pensé que algún día la iba a tener tan cerca”.


Juan Ignacio es futbolista de las divisiones inferiores de Sierra Chica, tiene 13 años y manifestó que “verla así, tan cerca, es una cosa increíble. Me acordé de Messi levantándola, todos llorando en casa. Son hermosas las tres. No puedo imaginar lo que se debe sentir estar dentro de una cancha y levantarla. Sería un sueño que me encantaría cumplir”.


A sus 33 años Adrián vio por primera vez a la selección argentina ganar una Copa del Mundo en Qatar. “Vine con mi hijo Dylan porque es una oportunidad única sacarnos una foto y disfrutar de esto. Era algo muy deseado ganar un Mundial, muchos años esperando y cuando finalmente se dio fue maravilloso” reconoció.


Dylan, de 8 años, no se atemorizó ante el grabador. “Me acordé de lo complicado que estaba todo cuando empezó el Mundial y perdimos con Arabia, pero cuando ganó me re emocioné y mi papá se largó a llorar y fue re divertido. Me gustó ver las tres copas” contó.

 


“Está tan lejos y ahora tenerla tan cerca es muy emocionante” expresó una joven abuela, que llegó al Centro cultural con su esposo y su nieto Maximiliano de 5 años, todos vestidos con la camiseta Adidas que la Argentina utilizó en Qatar. “Tratamos de explicarle a Maxi lo que es, vivió el Mundial con nosotros y para él también es algo nuevo” añadió.


Tobías, de 17 años, no dudó en manifestar su alegría por haber estado tan cerca de la Copa del Mundo y su “felicidad porque Leo Messi pudo ser campeón del mundo con la Argentina”.


Papa Adrián de 55 años se sacó una foto con la Copa del Mundo con su hijo Francisco y su sobrino Ian. No dudó en afirmar que vivió el Mundial 86 y el 78 “pero este Mundial fue el que más disfruté porque lo pude vivir con mis chicos y porque se necesita una alegría de estas características en el país”.


Francisco, su hijo mayor de 11 años, usó la palabra “felicidad” para calificar sus emociones al lado de la Copa del Mundo. “Lo primero que me acordé de cuando perdimos con Arabia y parecía imposible tenerla con nosotros, como esta tarde” planteó.


Ian usó la palabra emoción y admitió que “es más linda de lo que pensaba”.

 


Marianela llegó al Centro Cultural San José con su hijo Valentino, su esposo Ezequiel, un amiguito de Valentino y Brunella en sus entrañas. “Le vamos a contar con el hermano que estuvimos esta tarde con la Copa del Mundo, además tenemos todos los diarios y revistas del Mundial para que los vea” anticipó.


Benjamín, de 14 años, utilizó una de las metáforas más creativas en la recorrida por tantas emociones: “Sentí a la selección argentina al lado mío cuando estuve al lado de la Copa del Mundo y me acordé de Messi levantando la Copa. Siempre soñé con ese momento y lograr algo grande con la selección es hermoso”.


Agustina, empleada del Centro Cultural San José, fue testigo a lo largo de toda la jornada de la más variadas reacciones frente a la Copa del Mundo: “Me llamó la atención la emoción del público; las ganas de tocarla, pero no se puede y de una chica que entró llorando y se fue llorando”.


Joanna tiene 33 años y vivió todo el Mundial de Qatar en Nueva Zelanda. “No soy muy seguidora del fútbol, pero Argentina es Argentina y la Copa del Mundo es la Copa del Mundo” enfatizó.


“Vivir el Mundial en Nueva Zelanda fue mucho más intenso, por lo que se extrañaba, por sentir la camiseta de una manera tan especial. Miraba los videos y quería estar acá, en mi tierra. Son sentimientos muy fuertes, aquel y este de estar al lado de la Copa. Uno por haber salido campeón y ahora por tenerla acá” comparó.


“El día de la final eran las 4 de la mañana allá, nos juntamos todos los argentinos en un lugar, contratamos una pantalla gigante y cuando terminó el partido con Francia salimos a festejar por las calles” narró Joanna.


Dylan tiene 10 años y con su buzo del Inter de Miami se delató como uno de los “Messi lovers” del Centro Cultural y de todo el planeta. “Estuvo muy bueno. Fue una emoción tan grande como la del 2022” recordó y por si hiciera falta sumó: “Amo a Messi, cómo juega, como hace goles”.


“Alegría” fue la primera palabra de Ignacio, de 11 años, al verbalizar lo que fue tener a unos pocos centímetros la Copa del Mundo de la FIFA. “Fue un sueño tener las tres Copas frente a mí. Es algo que lo que voy a vivir una vez en la vida y no se va a repetir. Me hizo acordar a las tres finales que ganamos y fue un sentimiento muy lindo. Me encantó tenerlas enfrente ", apuntó.


Su primito Valentino de 6 años, en cambio, dijo que “al estar al lado de la Copa me acordé de todos los jugadores y fue muy lindo”.

Dejanos tu comentario

Más Noticias

Nuestras redes sociales

Programas
Verte +