“El vino es el mate de las bebidas alcohólicas”

Así lo definieron vendedores del rubro en diálogo con Verte. El rol social, nuevas experiencias y variedad de etiquetas, algunas de las explicaciones del “boom” del consumo.

El vino, histórico acompañante en la mesa de las familias argentinas en los asados, pastas y también presente en las reuniones y festejos, donde las copas se alzan para brindar.

El país cuenta con una enorme cultura vitivinícola como productor y consumidor de esta bebida alcohólica, que lo posiciona entre los primeros en el ranking de consumo per cápita, con una cifra promedio de 16,7 litros en el 2023 según datos del Observatorio Vitivinícola Argentino.

En Olavarría la situación no es ajena al resto del territorio nacional, pero en el último tiempo la apertura de nuevas vinotecas propició un auge en el consumo de los olavarrienses, cada vez más involucrados en el mundo del vino.

En medio del "boom" de la cultura vitivinícola local, Verte dialogó con distintas casas de vinos acerca del hábito de consumo local, las preferencias y cuál es su visión sobre el aumento del fervor por la bebida a base de uvas.

Con tres años de existencia en la Ciudad, la vinoteca "El Tonel" recibe diariamente a los vecinos que buscan diversas etiquetas entre tintos, blancos y rosados, entre otros, que exhiben en su local.

“El vino es algo que está presente en muchos hogares, pero últimamente mucha más gente se está adentrando en esta cultura para conocer más que lo básico, por lo que ha aumentado el mercado”, señalaron Victoria y Andrea, parte de El Tonel, sobre el aumento de consumidores de vino.

Por otro lado, Romina Reser, más conocida en el ambiente como "Chica Vinos", explicó que según su visión “el vino trascendió el espacio en la mesa” y ahora “se disfruta en otros espacios como un parque, leyendo o mirando una película”.

Mariano, de "Faro 18" también se refirió al auge actual y comentó: “La pandemia tuvo mucho que ver porque la gente empezó a probar cosas, y entre muchas se encontró el vino, y al ser un mundo tan amplio y social empezó a expandirse esa cultura”.

Cambio de consumo

Acerca del cambio de hábitos en el consumo, Victoria sostuvo que los jóvenes “han encontrado una forma de disfrute en tomar vino y probar muchas variedades”, en sentido contrario al consumo clásico que “todos buscan una marca o uva que les guste y cuando lo encuentran siempre compran el mismo”.

En algo que coincidieron todos los oradores es que desde hace un tiempo ha habido un incremento de mujeres que asisten a los locales, y no solo por vino blanco, como existe el prejuicio, sino que exploran por todo tipo de variedades y presentaciones.

“La fecha más fuerte siempre es el Día del Padre, pero el último Día de la Madre quedé sorprendida por la cantidad de ventas que tuvimos y todas las mujeres que vinieron a comprar para regalo”, señaló Andrea.

Al momento de descorchar una botella, Romina expresó que “es algo que tiene mucho detrás, con quién la vas a abrir, todo el trabajo que hay en una bodega que a veces es muy chica para que ese vino llegue a tus manos”.

Y agregó que “trato de que cada cliente se lleve un vino con el que sienta que es lo que necesita en ese momento”.

Sobre qué buscan muchos clientes a la hora de elegir una botella para comprar, las respuestas son diversas. Por un lado, están quienes consumen el mismo producto hace muchos años o al ser conocedores sobre las variedades como Malbec, Cabernet o Merlot, entre otras, tienen una opinión fundamentada.

Por otro lado, debido a la vasta oferta que existe en el mercado con miles de productores pequeños, eligen por el diseño de la etiqueta.

“Vienen y no conocen nada de vinos, pero se ponen a ver los diseños y se llevan el que más les atrae. En muchos casos vuelven a elegirlo y en otros no”, señaló Andrea sobre la forma de comprar de los ‘nuevos’ en la materia.

Además, sobre este punto Romina acotó que los productores “cada vez juegan más con los diseños para que sean más llamativos” porque “el marketing está ganando mucho terreno en el rubro”.

La pluralidad de calidades y precios también juega un rol fundamental debido a que cada persona puede ajustar su presupuesto y “en cualquier gama podés encontrar un producto con mucha calidad y sabor”.

Momentos únicos

Según el Observatorio, Argentina cuenta con más de 23.000 viñedos y 17.000 productores, con Mendoza a la cabeza con un 71% de la superficie cultivada y San Juan detrás con un 20%. Estos datos reflejan la gran oferta y variedad a la hora de elegir.

“Un vino no va a tener el mismo gusto en una situación de placer, con amigos o familia que tomándolo solo, tiene que ver mucho el contexto. Siempre digo que el vino más rico es el que te gusta”, afirmó Romina.

El rol social es tal que expresó: “El vino es el mate de las bebidas alcohólicas”.

“Si estás en un bar tomás un vino con soda y es el más rico, en un asado te servís otro tipo y en una cena elegante hay otras opciones, pero en todos los lugares es el más rico del momento. Tiene un lado muy social el vino”, complementó Mariano.

De esta forma, el encargado de Faro 18 explicó que “el mismo vino en un lugar te puede parecer excelente y en otro momento no gustarte” debido a que “todo tiene que ver con esos momentos”.

La tradición del brindis y el romanticismo que existe detrás de una copa de vino también han generado que sea una de las bebidas más elegidas para citas, entonces “cuando se sirve, hay un aura extra que se genera a partir de esto que trasciende a la bebida y que no pasa con otras, como un whisky”, remarcó Romina.

Nuevas experiencias

Uno de los escenarios que también ha reversionado la manera en que las personas toman vino y atrajo a nuevos consumidores al mundo vinícola es la gran cantidad de experiencias y eventos que se han generado alrededor de la bebida.

Catas privadas, barras solo de vino, eventos con manualidades, lectura y otras decenas de modalidades han generado un público fiel a estas reuniones.

Romina, además de vender los productos realiza degustaciones y asiste a eventos con una barra. “En todas las fiestas hay tragos como fernet, vodka o Campari, pero el vino siempre es algo que se dejaba en la mesa. Con la barra descubrí que a las personas les interesa probar una copa y aprender un poco, es distintivo”, comentó.

Mariano también se ha aventurado a ofrecer experiencias distintivas con vino de por medio. Una de ellas es la invitación a clientes a través de las redes sociales para una degustación en el local ubicado en Dorrego y Lavalle, totalmente gratis.

“Fue una idea que se nos ocurrió para estar un poco más cerca de los clientes, conocerlos y que se genere un buen ambiente en la comunidad. Vienen, escuchan un poco y después se ponen a charlar entre ellos y así se generan relaciones”, contó Mariano.

Además, próximamente se realizará "Cerámica y vino", un evento en el que los asistentes mientras disfrutan de una variedad de vinos crearán un cuento y una tabla para picada en cerámica.

Sobre esta actividad, Mariano remarcó que estos espacios están pensados para “hacer algo distinto, y a la gente le encanta, se divierten mucho”.

En ese sentido, Andrea de El Tonel, indicó: “Las personas buscan divertirse y con un vino de por medio la experiencia es distinta, se animan y sueltan un poco más”.

Por último, en forma unánime, los vendedores enfatizaron en que el consumo comenzará a aumentar con las nuevas generaciones que buscan estas actividades para salir de la rutina.