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15-11-2024

Una emoción que no se extingue con el paso de los años

Se realizó este viernes en el anfiteatro de Hinojo el homenaje a los tripulantes del submarino ARA San Juan, a 7 años de la tragedia que se llevó la vida Diego Wagner Clar.

Como cada año, y como seguirá sucediendo mientras se mantenga viva la memoria de los 44 héroes del Atlántico Sur, en el anfiteatro de Hinojo que preside una réplica del submarino siniestrado se realizó este viernes un nuevo homenaje a los tripulantes del ARA San Juan desaparecidos el 15 de noviembre de 2017, entre ellos el olavarriense capitán de corbeta Diego Wagner Clar.


El acto contó con la presencia del intendente municipal Maximiliano Wesner, la jefa de gabinete Mercedes Landívar, concejales de los distintos bloques, compañeros de promoción 133 de la Escuela Naval Militar, autoridades de la Base Naval Azopardo, representantes de las fuerzas vivas de la Ciudad, Emilio, Catalina y los hijos de Diego.



Al cabo de la entonación de las estrofas del Himno Nacional, el intendente Wesner y los padres de Diego Wagner Clar descubrieron junto a la escotilla original de la popa del ARA San Juan una placa que recuerda el trágico episodio del 15 de noviembre de 2017.


A continuación, Catalina Clar encabezó el descubrimiento de un mural de la Virgen María, donado por la Agrupación Esposas de la promoción 133 de la Escuela Naval Militar, bendecido por el padre José María Quatrocchio.


Seguidamente se colocaron tres palmas, a través de los padres del submarinista olavarriense y el intendente Wesner en representación de partido de Olavarría; los jovencitos Thiago, Manuel y Francisco (hijos de Diego) en representación de la familia Wagner Clar y una tercera de la promoción 133 de la Escuela Naval.



El espacio de la palabra fue ocupado en primer lugar por Facundo Rivadeneira, compañero de Diego, para entregar luego el sitio a las conmovidas y conmovedoras reflexiones de Catalina Clar, mamá de Diego.


“Nuestro hijo, Diego Manuel y sus 43 camaradas han dejado una huella imborrable en cada uno de nosotros. Su memoria será siempre el faro que guiará nuestra lucha por la verdad, por el reconocimiento y por la justicia” dijo Catalina.


Agradeció a “quienes nos sostuvieron, a quienes nos miraron a los ojos entendiendo nuestro dolor y a quienes, sin esperar nada a cambio, nos ofrecieron su hombro. En este camino de incertidumbre, ustedes fueron el ancla que nos permitió no perder la esperanza”.


“Que el ARA San Juan sea siempre recordado como un símbolo de coraje, de amor y de la incansable búsqueda de Justicia. En las aguas más profundas también florecen los recuerdos vivos de aquellos que nos unen y que nos dan fuerza para seguir adelante. Aunque las olas puedan arrastrar las sombras, la luz de sus almas jamás se extinguirá” expresó al borde de las lágrimas.


En sus últimas palabras agradeció la decisión unánime del Concejo deliberante, que en la sesión de este jueves aprobó bautizar con el nombre de ARA San Juan a un barrio de la Ciudad.


“Sin saberlo, en esos mismos terrenos Diego dio a sus primeros pasos, fue a jugar con su triciclo, con su primera pelota y su primer barrilete. Muchas gracias vecinos y Consejo Deliberante” cerró con énfasis.


Luego, el intendente Wesner, puso de relieve el compromiso de los 44 tripulantes del ARA San Juan “que lucharon y que dieron la vida por la convicción de cuidar nuestro Mar Argentino, nuestros recursos. Por la misma convicción que ingresaron a la Escuela y pudieron concretar un sueño”.


“Su sueño fue un sueño solidario, que tiene ni más ni menos que ver con el representar a todos nosotros, a los 47 millones de argentinos y argentinas que habitamos en esta tierra y en ese submarino iba un vecino de tantos barrios de Olavarría” resaltó el jefe comunal.


“La convicción del Ejecutivo Municipal, sin lugar a dudas, es anclar en este sitio la memoria, en este sitio la Justicia, acompañando a la familia y -como se los dije hace dos o tres días- estamos para lo que ordenen, para lo que necesiten” señaló.


“Sabemos del dolor, pero sabemos que este espacio tiene que ver con la resignificación, con transformar el dolor en una fortaleza para los compañeros que quedaron, de las familias que veíamos cómo se acercaban y descubrían una placa o depositaban una palma y es la fortaleza del conjunto. Es la fortaleza de los olavarrienses, la fortaleza de los argentinos y argentinas que queremos vivir en un país digno y soberano” enfatizó con sus últimas palabras el intendente Wesner.
 

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