22-12-2024
Se desarrollará este lunes con la caída del sol, en un contexto especial, con el templo recién bendecido y una temática gauchesca.
Aunque sólo matices los diferencian cada año, no será un “Pesebre viviente” más para la Capilla Ceferino Namuncurá de Villa Mailín y sus fieles. Será el primero luego de la ceremonia de bendición de sus instalaciones, encabezada el pasado 18 de noviembre por el obispo de la Diócesis de Azul Hugo Manuel Salaberry.
Acontecerá más o menos cuando en el oeste el lucero del alba se haga visible en el atardecer de este lunes 23 de noviembre. La misa está prevista para las 19, el Pesebre alrededor de las 20.30.
La realización del tradicional acontecimiento tiene como referente a Astrid Bidegaray.
“Nosotros todos los años organizamos Pesebres y vamos dándoles una temática distinta, siempre respetando la historia original, por supuesto” empezó contando.
Del de este 2024 describió que contará con la compañía de unos guitarreros, dos maestros de música y unas parejas de baile que le darán un tinte folclórico.
“Entre las 19 y las 20 se celebrará la última misa del año con lo que se va cerrando la actividad religiosa de la capilla, porque nosotros seguimos trabajando, y a partir de ocho y media más o menos va a ser el Pesebre. Buscamos que se vaya la luminosidad de la tardecita porque dentro de lo que se puede vamos a tener unos efectos de luces para darle una impronta más atractiva” destacó Astrid.
Una vez finalizada la escena habrá venta de choripanes y empanadas con el objeto de generar los recursos tan necesarios, no sólo para completar lo que aún resta en la obra, sino también para hacer frente al día a día.
“Si bien hemos recibido una donación muy importante siempre hay gastos de impuestos, de luz, de agua y de un montón de cosas y próximamente vamos a empezar a hacer eventos para tener nuestro propio altar, porque esta capillita no tiene altar” contó.
Pese a que durante la ceremonia de bendición de las instalaciones el templo contó con un altar, fue improvisado entre otras cosas con una mesa de la casa de Astrid.
“Es lo más simbólico en realidad que toda capillita debería empezar por el altar, pero nosotros necesitábamos terminar las paredes, el techo; nuestro refugio y dejamos en un segundo lugar nuestro altar. Todo tiene su costo y no es tan accesible” añadió.
Astrid entregó también algunos anticipos de lo que va a ser el Pesebre viviente de este lunes: “Vamos a proponer una voz en off que dé la bienvenida, después dos gauchos empezarán su contrapunto con sus guitarras en medio de un relato gauchesco”.
“Mientras este relato va llevando adelante toda la historia del nacimiento de Jesús, se irán presentando los protagonistas: tenemos un José, una María y un niñito Jesús que van a ir representando los distintos cuadros” dijo.
“Estará el cuadro de María con la visita del Arcángel Gabriel, después de María con su prima Isabel, que va a ser la madre de Juan el Bautista, después la salida de María y José rumbo al pesebre. Una vez llegados al pesebre se van a acercar angelitos, los pastores y los Reyes Magos” sintetizó.
Los participantes del Pesebre viviente en la capilla Ceferino Namuncurá serán fieles del barrio: una joven, con su pequeño hijo, harán de María y del niño Jesús. “De José le vamos a incorporar otro marido” bromeó Astrid.
La planificación contempla la ayuda del factor meteorológico para desarrollar toda la puesta en escena al aire libre.
“En caso de que el pronóstico se cumpla y no nos ayude el tiempo vamos a ver si el pesebre se puede hacer dentro de la capilla. No es la misma vista, no es el mismo disfrute, pero tenemos el compromiso con toda esa gente que se nos ha acercado de buena voluntad y queremos darle su espacio también” manifestó Astrid.
“Sería importantísimo que la gente nos acompañara, para ellos se sientan oídos, vistos y aplaudidos” solicitó.
Para el caso de que el tiempo no ayude, tampoco se suspenderá la venta de empanadas y choripanes, sino que cambiará la forma de llegar a los vecinos y se harán entregas a domicilio.