29-12-2024
Las cuentas no están equilibradas y la situación podría agravarse debido a las deudas. Un año atrás pidieron la colaboración de la comunidad con donaciones de dinero para comprar gasoil.
No fue un buen año para las cuentas de la Asociación de Bomberos Voluntarios de Olavarría. Ya en enero de este 2024 habían salido públicamente a pedir dinero a la comunidad para poder solventar los gastos de combustible que, según el comunicado difundido, se habían incrementado en el verano producto de las múltiples salidas.
A poco de terminar el año, aún no fue precisado de manera pública cuál fue el monto que pudieron recaudar y cómo se tradujo ese dinero en combustible para asegurar el funcionamiento de las unidades del Cuartel. Pero ese no es el único punto que genera inquietud por estas horas.
Se suma el retraso en el pago de los aportes a la obra social de los empleados, lo que generó dificultades en la prestación hace algunas semanas.
Además, se acumula una deuda con la ex AFIP en concepto de aportes patronales. Esta situación se remonta a los últimos cuatro años.
Otro ítem del endeudamiento de la entidad es con el proveedor de autobombas con sede en Buenos Aires. En ese caso el monto adeudado es cercano a los 90.000 euros, lo que representa aproximadamente 96 millones de pesos.
Verte pudo confirmar además que se sumaron cuatro camionetas VW Amarok a la flota pero que se compraron mediante planes de ahorro que también están atrasados en los pagos. Por si fuera poco, se suma la adquisición de camiones mediante un préstamo tomado en dólares.
También en los últimos meses un proveedor de combustible cortó la cuenta corriente por falta de pago. El panorama revela una situación económica delicada, ya que el dinero que ingresa entre impuestos y subsidios no alcanza para sostener los gastos fijos.
Aunque dejó de percibir el dinero proveniente de lo recaudado por el estacionamiento medido, no hay que dejar de lado que esta entidad recibe del estado local un aporte mensual dispuesto por Ordenanza, que dispone destinar a la institución un 1,5% de lo recaudado por la Tasa de Servicios Urbanos y Suburbanos y un 2% de Tasa de Servicios Generales Rurales.
Fuentes cercanas a la entidad analizaron que desde el Consejo Directivo se tomó la decisión de endeudarse pese a la incertidumbre planteada por un cambio de gobierno nacional y la adopción de otra política económica. Además, se hicieron inversiones que no eran prioritarias.
Consideraron también que en los últimos dos años se agravó la situación, al punto que hoy se puede hablar de una “deuda millonaria” que compromete el futuro de la entidad. Muchas de las personas que participan de la actual gestión del Consejo Directivo -que asumió en 2021- conocen esta realidad pero no se pronuncian al respecto.
No se puede soslayar tampoco que la actual conducción generó más puestos laborales, con la designación de personas a cargo de las áreas de Prensa y Relaciones Institucionales, con el consecuente aumento en la masa salarial que se debe disponer mes a mes.
La última mención pública sobre las cuentas fue en enero de este año, cuando reconocieron que no podían sostener el gasto en combustible de las unidades del Cuartel Central.
"La institución se ve afectada por este incremento de servicios que demandan un uso constante de las unidades y por ende un gasto mayor al habitual en combustible", sintetizaron.
Es en este contexto que se lanzó “la campaña de donación de gasoil”, se difundió un CBU y cuenta a través de la cual se podía donar dinero equivalente a 50 o 100 litros de gas oil. Hasta el momento no fue revelado de manera pública cuánto dinero se recaudó y cuántos litros de gasoil representó ese aporte de los vecinos.