18-03-2025
La noticia fue confirmada por Carlos Rottemberg a través de sus redes sociales. Había recibido el alta tras una internación de urgencia. Profundo dolor en la comunidad artística.
Este martes murió Antonio Gasalla, a los 84 años. La dolorosa noticia fue confirmada por Carlos Rottemberg a través de sus redes sociales, luego de una prolongada enfermedad y tras un largo y doloroso deterioro. Hace apenas unas semanas, había recibido el alta médica luego de una internación por neumonía en el Sanatorio Otamendi.
Su salud, ya frágil por la demencia senil que lo aquejaba, había generado gran preocupación entre sus allegados y seguidores. Su partida deja un vacío imposible de llenar en el mundo del espectáculo, pero también en la memoria colectiva de un país que creció con sus personajes.
El humorista pasó sus últimos tiempos en un centro de rehabilitación, lejos de los escenarios que alguna vez dominó con una presencia inigualable. Su hermano Carlos Gasalla, quien lo acompañó hasta el final, había confirmado el diagnóstico con palabras que aún resuenan: “Quiero ser claro: tiene demencia senil. Es una enfermedad que va a seguir avanzando. Antonio no tiene conocimiento ninguno, no habla”.
Mamá Cora de "Esperando la carroza", uno de los personajes más icónicos de Gasalla.
Su amigo y confidente de años, Marcelo Polino, lo describió con brutal honestidad en aquel momento: “Antonio está bastante complicado. No camina, no nos reconoce desde hace más de un año. Ya casi no habla, se alimenta por un botón gástrico. Es un panorama muy triste”.
Para millones de argentinos, Gasalla no era solo un actor. Era el hombre que, con una peluca y una carcajada forzada, se convertía en Mamá Cora, la abuela desquiciada de Esperando la carroza (1985), inmortalizando frases que hoy son parte del ADN cultural del país.
Fue también La Empleada Pública, esa mujer resignada que enfrentaba la burocracia con una mezcla de ironía y hartazgo. Soledad Solari, la diva decadente. La Abuela, que en los años 90 y 2000 enloquecía a los invitados en los programas de Susana Giménez con preguntas incómodas y comentarios filosos.
Hace un mes, en la entrega de los Premios Carlos en Villa Carlos Paz, su ausencia se sintió con fuerza. El galardón honorífico que recibió quedó en manos de su hermano, quien subió al escenario con la voz entrecortada. “Es muy emocionante y creo que es merecido. Esto es un aliciente para nosotros y un reconocimiento por todo lo que le dio al teatro”, dijo Carlos, con la estatuilla en las manos.
Con información de Infobae.