20-04-2025
Abel Alves, que compartió cinco años en el plantel de Boca con Hugo Orlando Gatti, resaltó la figura del notable ex arquero que dejó de existir este domingo en Buenos Aires.
Foto: Abel Alves, segundo desde la izquierda, en una formación del Boca campeón de 1981 con Diego Maradona.
Abel Aníbal Alves debutó en Boca a mediados de 1975 siendo un pibe, el “Loco” Gatti llegó al club de La Ribera ya con un recorrido importante en el fútbol argentino a comienzos de 1976 y desde entonces hasta mediados de 1981 compartieron varios de los momentos más gloriosos del club.
Este domingo, el olavarriense oriundo de Calera Feitis, fue convocado por ESPN minutos después de conocida la noticia del deceso del mítico arquero para pintar una semblanza de ex Atlanta, River, Gimnasia La Plata, Unión, Boca y la selección argentina.
“El Loco nos dejaba con la boca abierta con las cosas que hacía”, reveló el "Chueco" en un momento de la charla con los periodistas de SportsCenter.
“En el grupo de Whatsapp que tenemos con los ex jugadores de Boca sabíamos que la estaba peleando y teníamos mucha fe de que la podía sacar adelante, así que esta noticia fue tremenda para nosotros” confesó el “Chueco”.
“Cuando él vino a Boca en la época de Lorenzo yo era uno de los jugadores más jóvenes y a menudo nos juntábamos en la habitación. Conocí a su familia, a sus hijos y era una persona muy especial el ‘Loco’ y fue un adelantado en el tiempo” resaltó.
“El siempre me decía que fue arquero por esas cosas de la vida, pero que él podía jugar en el campo tranquilamente. Cuando hacíamos esos picados en La Candela el Loco jugaba de delantero y hacía unos goles y unas chilenas tremendas y cuando hacía los goles siempre los cantaba como si fuera Luisito Artime” contó Alves.
Compartió otra anécdota conocida de Gatti: “En las concentraciones se permitía tomar sólo una copa de vino y los chicos ninguna, así que él siempre se venía a la mesa de los pibes para tomarse su copita de vino y la de nosotros también. Era un personaje tremendo, yo lo quería muchísimo”.
“El ‘Loco’ si me decía cómo vivía el fútbol. No era de dar consejos, pero sí nos tiraba mensajes que uno se quedaba impresionado y una de las cosas que más me quedó fue que en el fútbol es importantísimos tener lectura de juego. El no era el mejor arquero argentino, en ese momento estaba Fillol, pero el Loco tenía tanta visión de juego que antes de que pateara el jugador rival sabía para que lado iba a ir la pelota” expresó.
Alves destacó otra de las grandes virtudes de Gatti: “Para sacar de abajo le pegaba a la pelota como ninguno. Muy, muy bien y como yo con el Cabezón Ruggeri era uno de los que mejor cabeceaba él nos pedía que cuando caían los centros en nuestra área en lugar de rechazarla se la diéramos de cabeza para sacar los contragolpes rápidos con el pie”.
“El ‘Loco’ era un adelantado a su tiempo. Cuando ningún arquero salía jugando con los pies él lo hacía. Hoy los arqueros que no saben jugar con la pelota en los pies no pueden atajar en primera división” sostuvo el olavarriense, que trabajó un largo tiempo como entrenador de las divisiones inferiores de Boca junto con Jorge Bernardo Griffa y fue DT de la primera división en 18 partidos.
“Salía a descolgar centros con una mano, hacía cosas imposibles, como a veces también cometía errores y los pagaba caro, pero era un tipo con una personalidad y un atrevimiento tremendos” valoró.
Abel recordó también los prolegómenos de aquella tarde de 1980 que Maradona, jugando para Argentinos Juniors, le metió 4 goles a Gatti en la cancha de Vélez: “El ‘Loco’ había declarado que Diego era un gordito agrandado con la prensa y con Diego habíamos entrenado en la selección juvenil. Me acuerdo que me llamó para decirme ‘decile a ese jetón que se deje de joder porque le voy a meter cuatro’ y le metió cuatro”.
Al año siguiente, Gatti, Maradona y los hermanos Abel y Hugo Alves formaron parte de uno de los equipos campeones de Boca más recordados de todos los tiempos.